¿Quieres venir a ver a la Selección entrenando? Tengo un pase. Ni lo dudé. Y allí que nos fuimos Javi y yo, al maravilloso polideportivo de Bahía Sur de San Fernando, donde la Selección Española de Baloncesto preparaba su Europeo. En las gradas, fascinado por la contemplación de mis héroes, me sentí sumergido en la novela de Gulliver, pero el enano era yo. El más chiquitín, Ricky Rubio, me sacaba la cabeza. Y para mirar a Pau, Garbajosa o Marc era necesario imitar a los turistas de Nueva York y su dolor de cervicales al finalizar la jornada.
Nada os voy a contar de la calidad individual de la que hacían gala entrenando. Os voy a contar lo muy de putísimamente bien que se llevaban sobre la cancha y fuera de la cancha. Continuamente estaban bromeando entre ellos. Si alguien sufría un resbalón y se partía el careto o se daba una culá de bebé torpón, los demás se partían la caja con esas risas infantiles que sólo son posibles cuando nacen del cariño y la verdadera amistad. Se llevan a las mil maravillas y me dio por pensar que ese ambiente tan propicio para la convivencia y la complicidad, tan necesario para que un equipo de lo que sea funcione sincronizadamente, no era un producto manufacturado por generación espontánea.
Y entonces me acordé de los jóvenes airados que conquistaron la plata en Los Angeles 84. Han pasado veinticinco años y ahí los tienes. Cada vez que se juntan en un plató de televisión o como comentaristas la lían con sus bromas y su fresca espontaneidad. Los Iturriaga ( qué sentido del humor tan especial tiene este vasco fantástico), Romay y su bohonomía, Epi y su carácter aristocrático y generoso, Corbalán y su humor negro...; en fin, todos. Todos hacían una piña de colegitas gamberros y bromistas y esa impronta se ha quedado como marca de la casa.
Daba gusto verlos ayer abrazados y emocionados por la conquista de su primera medalla de oro en un Europeo.
Por destacar a uno lo haré con Pau, pero no por su innegables cualidades deportivas que le convierten en uno de los mejores jugadores del mundo del baloncesto profesional, sino porque el tío no se lo tiene creído, es de una calidad humana y una humildad que te desarman, siempre amorosamente pendiente de su hermano pequeño Marc, corrigiendo sus fallos, abrazándole, animando a los demás, sufriendo cuando no puede aportar su juego por estar lesionado, siempre tan generoso, tan atento, ...no sé. Me parece un ser humano extraordinario. Un tío que no tiene ningún problema a la hora de tomarse una cerveza contigo aunque te acabe de conocer.
Me gusta mucho el baloncesto, en otra dimensión que el fútbol, pero también me gusta mucho, y sin miedo me atrevo a afirmar que vibro mucho más con los partidos de la Selección de Baloncesto que con la de Fútbol. Mi enhorabuena a los chavales, el regalo que nos hicieron ayer fue prodigioso, ganamos por más de veinte puntos en una final, y si los pronósticos no fallan...tenemos jóvenes airados (reyes del aire) para una buena e imbatible época dorada.
Y ahora les voy a dedicar una canción de Loquillo, un cantante también muy buena gente que de vez en cuando se echa su partidito con la vieja escuela. Tengo entendido que estuvo a punto de dedicarse profesionalmente al baloncesto. Loquillo mola. Y mola nuestra Selección de Baloncesto.
qué tiempos lo de los 80!
ResponderEliminarMe encanta el baloncesto!
Felicidades al equipo!
Que suerte poder verlos taaannn cerquita
Mi especialidad son los tiros de tres puntos. Para el área soy muy torpón y siempre me ponen pinchos de merluza y tapones, como en la vida real.
ResponderEliminarS., son geniales, de verdad.
Ole oleeeee esa selección de baloncesto!! Aunque la verdad es que no me gusta demasiado el basket... :S
ResponderEliminarUn besoteeeeeee!!
No entiendo ese juego. ¡Qué no se pueda mear en la canasta una vez sometido el contrario reclamando la victoria.
ResponderEliminarRaro planeta este.
Venaquí.
Escúchame, Venaquí, como can eres un desastre y dudo mucho que me convenzas para que te presente a mi husky siberiana. No puedes mear en la canasta porque eres la vergüenza de la raza chihuahua y apenas puedes levantar la pata. Aquí no hay tantos cráteres pipicanes como en tu planeta.
ResponderEliminarEa!.., pero si tu eres alta y delgada como tu madre, morenásaladá, como tu ma-dré..¿Como es que no te gusta el baloncesto? Un besote.
Bueno, no quiero entrar en detalles, pero tu Husky no es la primera vez que me huele el culo. Que igual yo lo interpreto mal que esto de los lenguajes interplanetarios no se me da muy bien y en Rex no lo explicaban, pero, debes at.arla en corto.
ResponderEliminarVenaquí
Jajajaja.., Venaquí se mete con mi mascota. Al final el extraterrestre-perrillo va a ser que no tiene miedo a la muerte, jajaja..
ResponderEliminarAnde este una buena corridaaaa!!!!... jejejeje
ResponderEliminarIlusooo... Tronckooo!!!.. tu tambien haces noches???... igual nos cruzamos en alguna sombra de alguna esquina una noche de estas!!!...
tronckoo... era copileft guarani??... jajajajjaja..que buenooo!!!..jejeje..
pos no queda mas cojones que explicarlo!!!... y pillarte otraaaa!!!!...te la curras con tu voz o dejamos al gutural de siempre???... Volveremos a bucearte pa ver que pescamos!!!!...
saludossss y a la piltraaaaa que ya ha salido el sol!!!!!
saludos compadreeeeeeeeee!!
A ver si voy a tener que arrancar el cuello a más de un chucho que hay por aquí suelto...
ResponderEliminarQue los Huskys tenemos muy mala leche...y Rex era un perro alcohólico degenerado,así acabó como acabó,de muerte por tos perrera.
jajajajaja..., ¡ésa es mi husky siberiana, con un par..., jajaja!
ResponderEliminarComo si ser alcohólico degenerado fuese algo malo. La cultura humana está de repleta de genios alcohólicos y degenerados. La perruna no iba a ser menos. En el roce está el cariño, cariño.
ResponderEliminarY los huskys que se dediquen a tirar de los trineos. ¡Jou,jou!
Venaquí.
Ay...1984, L.A., Loquillo,...qué tiempos aquellos...
ResponderEliminarSiempre quise ir a L.A., dejar un día esta ciudad...
Recuerdo cuando Loquillo empezaba en el mundo de la música, que se paseaba por la calle Pelayo y la Avenida de la Luz, en bcn, y lo veiamos por allí. Lo dicho, qué tiempos aquellos...
Si señor , pedazo de selección , pueden con todo!!!
ResponderEliminarEn cuanto a Loquillo discrepo , hace unos meses levantó la mano pidiendo taxi y lo ignoré , por que? pues por que lo lleve en una ocasión y ya tuve bastante , pelin chulito el tio . Pero que conste que me gusta su obra .
Coño, Cacharro, cuenta, cuenta...¿En que te basas? Dános tu luz y explica por qué te pareció tan chulito.
ResponderEliminarAy, Síster, tú también suspirando por el año 1984. Entre los dos vamos a liar un tornado. Un besito, kariñete.
Venaquí insiste en meterse con la raza aria perruna. "Hubo una vez un perro sin miedo a la muerte"..¿no era una canción de Sarita Montiel?, jejeje....
Murmullitos, puedes bucear todo lo que quieras. En la Casita Sin Barrer tengo un texto que a lo mejor les gusta a tus castos oyentes. Un momento, a ver si te lo linkeo coypleft. Te dejo esto y esto otro
Puedes hacer toda la copylefa y todo el bukake que quieras con mis paridillas. Un abrazo
Jajajaja, "Cacharro", ..líbreme Dios de llamar Cacharro al batería más guapo del Mediterrénao. Cachorro, CAchorro for ever oh yeah!
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