viernes, 9 de octubre de 2020

LA CALETA



 Aquí os dejo dos fotografías de uno de los lugares más emblemáticos de la Bahía de Cádiz, por no decir el que más, que opta a un concurso nacional para elegir el atardecer más bello de España...

Amor que llegas tarde,
tráeme al menos la paz:
amor de atardecer, ¿por qué extraviado
camino llegas a mi soledad?

amor que me has buscado sin buscarte,
no sé qué vale más:
la palabra que vas a decirme
o la que yo no digo ya...

Amor... ¿No sientes frío? soy la luna:
tengo la muerte blanca y la verdad
lejana... -No me des tus rosas frescas;
soy grave para rosas. Dame el mar...


Dulce María Loinaz

jueves, 24 de septiembre de 2020

GALANTES

 


Cuando las tropas alemanas se retiraron de la Ciudad Inmortal se la declaró como "Roma, ciudad abierta", y esta señora entendió de forma muy particular dicha declaración.

Me pregunto también cuántos siglos debió esperar el Coliseo para volver a ver a forjados luchadores con falditas.

William Wallace y los suyos no tenían problemas a la hora de exponer sus pantorrillas a los gélidos vientos de las Highlands escocesas. Tiene que haber, en esa latitud, una relación directa entre esa moda indumentaria con la ingesta de ardiente whisky.

El caso es que estos combatientes escoceses fueron los que más "galanterías" cosecharon dentro del Ejército Británico. No se esperaba menos de los descendientes de Braveheart.

Las galanterías son condecoraciones al valor ejemplar: un elogio de la reina en forma de medalla.

Galante: que es educado, cortés y atento en el trato.

Así que no es descabellado pensar que estos dos aguerridos gladiadores modernos le hicieran la siguiente observación:

.- " Señora..¿tendría usted la amabilidad de levantar la falda a su puñetera madre?

viernes, 11 de septiembre de 2020

VENTANAS


 Incluso a los seres peores les gustan las ventanas ¿ La reconocéis?

Menos a las moscas, que no entienden que la transparencia de un cristal les corte el vuelo pertinaz , que diría Machado, a todos nos gustan las ventanas.

Les gusta a los enamorados que tiran piedritas de atención, aunque ya no se estile para nada.

Les gusta a la lluvia que la convierten en un gong de dulce monotonía adormilada.

Les gusta a los poetas lamentables como yo,  porque rima con humana, con lozana y con sotana.

Le gusta a la brisa, que se cuela por ellas preguntado por tu alma.

Y a la Luna, que se mete sin permiso en los pliegues de tu cama.

Y a Dalí, que aprovecha , el muy tunante, para deleitarse con el culo de su amada.

Ahhh...asomarse a la ventana.., cómo nos restituye los ensueños y cómo, a diario, da un beso a la mejilla de la mañana. Y  ahí fichamos, cada día, al subirnos la persiana.

Y, ahora que lo pienso, Anabel, qué bien que rima también ventana con crema catalana.

Y, sobre todo,  son más fiables, mucho más, que las puertas aunque estén damasquinadas: no te engañan.


martes, 18 de agosto de 2020

TAN EXTRAÑO TODO

 

¿Qué vida es ésta en la que la muerte ni siquiera ya se esconde?

Donde los besos, los abrazos, los apretones de manos, las palabras y hasta las miradas se contemplan desde lejos.

Amaneceres vacíos de inquietudes positivas

Anocheceres que son escondrijos de temores

Tan extraño todo. Y todo lo que extrañamos.

Nunca antes los recuerdos me consumían tan  a gritos, reclamando un retorno imposible

Se extinguen..., y nos ponemos mascarillas en la boca, para qué...., si nos contamina igual el olvido que existe detrás de cada beso, de cada abrazo, de cada apretón de manos, de cada palabra y de cada mirada que tienen miedo.

jueves, 23 de abril de 2020

EL VERDADERO MIEDO



Cuando, acostado en una cama, la noche eterna te roba el sueño y su misión de descanso se enquista en un cansancio de alma...; cuando se te agolpan los paseos que dabas en forma de nostalgias acusadoras, ese remordimiento de no haberlos disfrutado plenamente..., paseos...amigos...amores...familia...vida al aire libre..., todos esos instantes que nuestra adormecida inconsciencia los convirtió en inapreciables...., entonces...., entonces es cuando tengo miedo

lunes, 6 de abril de 2020

LUIS EDUARDO



Aute tenía nombre de culebrón venezolano...Luiseduardo......Se ha despedido de nosotros en tiempos turbios. Pero nos dejó mucha poesía escrita con el alma, y mucha sabiduría también.

Me cuentan que las mascarillas, las pocas que se venden alguna en farmacias o mercado negro, pueden alcanzar el precio de cincuenta euros, cuando normalmente valen tres o cuatro.

Tiempos llenos de fealdad......No olvidaros nunca de que la Belleza la mata....A la larga, la mata.


"Enemigo de la guerra
Y su reverso, la medalla,
No propuse otra batalla
Que librar al corazón
De ponerse cuerpo a tierra
Bajo el peso de una historia
Que iba a alzar hasta la gloria
El poder de la razón.
Y ahora que ya no hay trincheras
El combate es la escalera
Y el que trepe a lo más alto
Pondrá a salvo su cabeza
Aunque se hunda en el asfalto
La belleza.
Míralos como reptiles,
Al acecho de la presa,
Negociando en cada mesa
Maquillajes de ocasión;
Siguen todos los railes
Que conduzcan a la cumbre
Locos, porque nos deslumbre
Su parásita ambición.
Antes iban de profetas
Y ahora el éxito es su meta;
Mercaderes, traficantes,
Más que náusea dan tristeza,
No rozaron ni un instante
La belleza"
Buen viaje, Luis. Gracias por esta tan bella canción, y todas las demás tuyas



miércoles, 8 de enero de 2020

DEMOCRACIA



El poder real de una democracia descansa, bajo mi punto de vista, sobre cualquier otra consideración, en saber perder.

Y una vez que se encaja la derrota, comprender la naturaleza de todo cuanto resulta una estupidez para comenzar a funcionar con racionalidad.

Hemos sido testigos en los últimos tiempos de muchos actos estúpidos, estériles, y no por ello menos dolorosos, que han recaído negativamente en una convivencia sana basada en el respeto y la educación.

España lleva siglos sin afrontar cómo dar cabida a los sentimientos más que a las ideas, llevamos encorsetados demasiado tiempo y no sabemos explotar todas las posibilidades que nos brinda la inteligencia para poder dar salida digna a todos los sentimientos.

Hora es ya de no dejarlo todo en manos de la insensatez y de la inexorabilidad de leyes que marginan, a unos y a otros.

Es muy fácil. Se trata de preguntar la pregunta correcta. Y, después, de encajar la derrota.