martes, 16 de enero de 2018

EL INSTANTE MAS OSCURO



En el patio de mi casa... qué haría Winston Churchill?

Siempre que recurro a un ejemplo incontestable de valía política, rescato su recuerdo y su legado. Gary Oldman se ha embutido en su puro de forma tan magistral como Bruno Ganz lo hizo con los temblores de un decrépito Hitler, convertido en un zombie en las tripas de su último búnker.

Resultan impactantes estas resurrecciones gracias al talento interpretativo

El Instante más Oscuro se llama la película y nos recrea la página más épica escrita por una población y la voluntad de un solo hombre a lo largo del siglo XX, tan pródigo en acontecimientos de los que nos ponen a prueba como especie que merezca la pena.

Churchill hizo que valiésemos la pena. En un momento en el que el nacionalismo nazi devoraba países de Polonia a Francia, o los amedrantaba como Suecia, o los engullía como España, Hungría, Croacia o la Noruega del colaboracionista Quisling, en un momento en que se anexionaba países enteros como rosquillas sin disparar un tiro, en un momento en el que Estados Unidos sesteaba pensando que con ellos no iba la cosa y la Unión Soviética se sumaba a la fiesta para repartirse con los agresores una buena porción de la tarta invasora..., solo Inglaterra , liderada por Churchill, se enfrentó con valentía al monstruo devorador, poniendo fin a una hipocondría política crónica europea que permitió cobardemente el rearme y las anexiones alemanas.

Estuvieron solos. Más solos que la una hasta que despertó el gigante americano y a la Unión Soviética le salió rana el pacto con los germanos.

Churchill fundía en su persona el talento, la lucidez y la capacidad para analizar los hechos, y advertía sin complejos ni maquillajes correctos el peligro que representaba esa ideología , tan supremacista como odiosa. Nadie le hizo caso hasta que fue demasiado tarde, hasta que quedó claro a todo el mundo de qué iba la jugada mortal. Y la jugada mortal era la supervivencia de los valores democráticos.

Se echa de menos a políticos como él. Está claro que las personas con talento huyen de la escena política porque se ha convertido en un pesebre de mediocres, ambiciosos y corruptos..También de iluminados con ganas de hacernos pensar como lo hacen ellos. Mi país está hecho una mierda en manos de esa clase de representantes políticos, incapaces de entender y entenderse y de poner coto a los desmanes, de dignificar la política.

Por eso, a la salida del cine, me pregunté.....Qué haría Churchill en el patio de mi casa?

Y me contestó Kennedy...." no te preguntes qué puede hacer tu país por ti, sino lo que puedes hacer tú por tu país"