domingo, 31 de marzo de 2013

CON UnANGEL



"La amistad, entienden otros,
es una prolongada conversación
sobre el consumo del tiempo
haciendo las horas perdurables.
La amistad es goce de las palabras
y un memorioso ajedrez
cuya partida es  el placer,
de escuchar al otro y despedirse
con un ilusionado ¡hasta pronto! "
H. Alvarado

Angel..., gracias, muchísimas gracias

Mira el mar, Angelillo. Creo que quería escuchar hasta nuestros silencios, y mientras estuvimos juntos, se calló.

     

lunes, 25 de marzo de 2013

UNA HISTORIA DE AMOR


Pues resulta que no, quesmentirató. El poder de la Literatura es tan imponente que es capaz de reescribir la Historia al antojo de la imaginación de un autor con arte suficiente para tergiversar lo que le dé la gana de forma convincente y, lo que es peor, para siempre. Y si no, que se lo pregunten al eficiente Cardenal Richelieu, convertido en un felón y mal bicho para los restos por obra y gracia de Alejandro Dumas y las andanzas de tres más uno espadachines.

Homero fue el primer periodista de la Historia. Pero era un periodista de estos que si la noticia no se ajusta a lo que él quiere contar, retuerce su pescuezo lo que sea necesario hasta que cuente lo que le interesa contar; un periodista que moldeó una serie de acontecimientos históricos a la medida de una trágica historia de amor con cuernos por medio.

Chico guapo asiste a fiestorro palaciego y conoce chica mollar guapa casada con impresentable gordo, barbudo, desaseado y más machista que la serpiente del Paraíso. Chica guapa pica billetes con él para vivir tórrido romance sin importarles las consecuencias.

Y las consecuencias son que el marido cornudo coge un rebote de aquí te espero, le va llorando a su hermano rey de Micenas que le ayude a lavar tamaña afrenta cornudil y que, por dios, por dios, que no se olvide de fichar para la escuadra a los machacas campeones Ajax, Ulises, Patroclo, su primo de zumosol Aquiles y Arnold Chuachenegger para escarmentar a ese milonguero picaflor troyanito robamujeres.

Este picaflor tiene la santa suerte de tener un padrazo que, además de ser rey de Troya, es de esos papis que protejen a sus hijos aunque la caguen y la líen parda; y la suerte, también, de disfrutar de esa clase de hermano mayor que cuando uno mete la pata, se te queda mirando muy serio y te dice: " ¡ pero tú estás tonto o qué? !", y aunque te manda a la mierda, como es noble y buen hermano, saca la cara por tí aunque le hayas jodido bien. Hacedme caso que yo de eso entiendo mucho.

Resultado final según el periodista de la Agencia EFE de la época , sr. Homero: un cacao de mil pares que sirve para que Ajax, Menelao, Héctor, Aquiles, Patroclo  y unos cuantos miles más de extras la palmen heroicamente con tal de que el muchacho guapo se quede con la muchacha guapa. Es que, si al final, y a pesar de todas las desgracias, siguen juntos Paris y Helena, es una historia de amor que ha acabado casi bien aunque Troya haya acabado convertida en la Falla de Ná Jordana.

Todo muy romántico, verdad ? Yo no estaba ahí. Me ocurre lo mismo que a Homero, que no estaba ahí, pero me juego el cuello que lo que pasó en realidad fue lo siguiente:



Mirad el mapa. La ciudad-estado de Troya estaba situada en un enclave estratégico, en el cuello de botella del estrecho de los Dardanelos, que comunica el estómago rumiante del Mar Negro y el pequeñito Mar de Mármara con el mítico mar Egeo. Tan estratégico como las garitas a la entrada de Isla Mágica o Eurodisney. En ese estrecho, durante algunos meses al año, con los barquitos de vela de la época, era imposible remontarlo porque soplaba un viento en contra imposible de superar. Una especie de efecto embudo eólico parecido al del Estrecho de Gibraltar y nuestro dichoso viento de Levante. De manera que, si querían llegar a su destino comercial, o bien tenían que proseguir su ruta por tierra ( para lo cual tenían que pagar más derechos, cánones e impuestos a los aduaneros troyanos, señores de esa franjas de tierra y mar), o bien aguardar con los barcos amarrados las semanas o meses necesarios hasta que el ventarrón amainaba o cambiaba de dirección favorable ( para lo cual tenían que alojarse forzosamente en la ciudad de Troya, que les cobraba un pack por persona y día sin derecho a Spa igual que si se alojaran en un hotel de la cadena Barceló )
 Ese gran negocio acabó con la paciencia de los griegos, se les inflaron las pelotas y decidieron que ya era hora de tumbarles el chiringuito. Arrasaron Troya y les invitaron en lo sucesivo a cobrar aduana a su puñetero padre. Fue un puro asunto de negocios, como casi todo en el devenir de la Humanidad.
 Sólo money-money. Ni pizca de romantismo que valga. Lo siento.
 Pero esta historia tan prosaica y repetida a lo largo de la Historia ( los chipriotas son ahora los griegos aqueos de la época y Merkel una troyana que está pidiendo a gritos que le prendamos fuego), esta historia, digo, sí que tiene un salvavidas muy pero que muy romántico.



Nos encontramos con un enamorado de La Odisea y La Eliada, siempre con estos libros bajo el brazo, convencido hasta el delirio de que  Troya no fue una invención, una leyenda. A todo esto, sus academicistas colegas arqueólogos cachondeándose de él a troche y moche, rechifla que este hombre apasionado se pasaba por el forro. Le daba igual que se rieran de él, e igual le daba que se estuviera arruinando con el costo de sus excavaciones. Tenía un sueño por cumplir, una historia de amor desesperada, como la canción de Triana: encontrar Troya.
 Y la encontró por fin  más de tres mil años después en la colina de Hissarlik, desde donde se domina la entrada al estrecho de los Dardanelos. No podía estar en otra parte. Digamos que ese admirable soñador se creyó a medias las crónicas de Homero.
 Si era una historia de amor fatal, Troya podría no existir o encontrarse vaya usted a saber. Pero si era una ciudad-estado que floreció y se mantuvo de forma pródiga durante tanto tiempo en medio del desierto improductivo, es que era gracias a los tributos que cobraba a todo aquél que quisiera atravesar el estrecho. Y sólo podía estar ahí donde el visionario y romántico Heinrich Schliemann supuso desde el principio que podría estar.
 Cuando le cuento mi versión a Marga, reconoce que el mérito romántico de la historia de Troya pertenece por completo a este gran hombrecillo, que como un topo no se cansó de excavar hasta hacer realidad su sueño, pero que a ella le merece más la pena la versión de Homero sólo porque Aquiles acabó en el cuerpo de Brad Pitt...¡!
 Lo cual afianza mi creencia de que cada uno interpreta la Historia a la medida de sus desmedidas fantasías. ¡Qué jodía ! Total, no sé qué pueda tener Aquiles o Brad Pitt que no tenga yo, así que me voy a excavar un poco a ver si encuentro la respuesta porque si me hago esa pregunta es señal de que también tengo un sueño o estoy soñando.

lunes, 18 de marzo de 2013

DETRÁS DE SUS FOTOS



No me interesa Marilyn, pero Norma sí.

Me da igual que fuera una indisciplinada en el set de rodaje ( seguramente porque no era el productor de sus pelis) , que tuviera que repetir cuarenta veces una toma en la que pronunciaba una frase con dos palabras, que Tony Curtis dijera que besarla era como besar a Hitler ( eso no se lo cree nadie...¡ay los hombres..cómo con su rencor ajustan cuentas con sus fracasos!) , que ningún director quisiera volver a rodar con ella, que Lawrence Olivier necesitara tratamiento psicológico tras convertirla en su corista y que "nunca mais" con "esa rubia de bote engreída", que los Kennedys' Brothers compitieran entre ellos para ver quién se la había tirado más veces.....

Lo que no me da igual es que se deshicieran de ella de esa manera. Se estaba autodestruyendo..no? Pues un empujoncito más y se acabó el problema, que no puede ser que se pierdan las elecciones por culpa de un "Happy Birth Day To You" con transparencias. Y tampoco me resulta indiferente que su segundo marido, Joe DiMagio, no dejara ni un día sin flores su tumba. Marilyn despertó la repulsa de todo aquél que trabajó con ella, pero Norma enamoró de verdad a un hombre que, en aquella época, era tan legendario o más que ella misma. Al menos se sabe que enamoró de verdad a un hombre.

No me interesa cómo la belleza natural y abrumadora es capaz de fagocitar todo el poder de revelación de lo real que posee el arte fotográfico. No es verdad que la fotografía no engaña. Engaña, y mucho. Marilyn es un buen ejemplo. Si escoges al azar cualquier fotografía de su inmenso Book virtual, la fotografía mostrará a una mujer apabullantemente bella, pero no mostrará una niñez y una adolescencia machacadas por el abandono familiar, el alcoholismo y la locura de su madre, por la..., no ya la carencia de una figura paterna, sino siquiera de una pista de quién podría haber sido su padre,  por las violaciones sistemáticas y múltiples de las que fue objeto en cada casa de acogida por las que pasó. ..Todo ello engendró una terrible contradicción en una niña todavía no consciente del inmenso poder que atesoraría en un futuro próximo para reinar en el poderoso reino de la superficialidad , dueña y señora de la sociedad antes y igual que ahora. Y todo gracias a un simple regalo de la naturaleza: una belleza magnética.

Por culpa de la inseguridad de su desamparada niñez, no sabía qué hacer con su imagen fascinante. Y por culpa de su imagen fascinante, no sabía que hacer con su ofendido y humillado pasado. Por esta razón siempre buscó el amparo y la aceptación de hombres muy seguros de sí mismos: deportistas de élite, gurús de la intelectualidad y políticos con el viento a favor.

Pero ya era demasiado tarde. Continuaba siendo un trofeo, un objeto de manipulación y ella carecía de voluntad de resistencia y autoafirmación. Se las habían robado enteras y desde entonces permaneció sola y asustada por lo que mostraba cada fotografía y que solo ella era capaz de ver.

¿Qué mostraban sus fotografías? Para nosotros, ya lo sabemos: glamour, erotismo, éxito, incluso arte en esa escena tan onírica en la que una bocanada de aire caliente levanta su falda y dispara la imaginación de quien la contempla.

Pero..., ¿qué veía Norma? Resulta muy tentador hacer de diletante psicoanalista con Marilyn Monroe. Muy tentador, tanto como su cara, sus labios, sus senos, sus piernas..., por eso no quiero caer en la tentación, que vivo arriba, en un cuarto.

Solo quiero ponerme en el lugar de ella, imaginarme que mi niñez ha sido tan terrible como la de ella, y que en menos de un mes mi vida pasa de ser una pesadilla de abandono y abusos a un foco de atención mundial, él éxito brutal e inesperado que te convierte en un mito de masas.

A partir de ahí Marilyn veía en cada foto una mercancía que sin esfuerzo alguno encandilaba a la cámara de fotos y al espectador y que, por fin, le proporcionaba dinero y lujos.

¿Y Norma? ¿Qué veía Norma?  Norma no podía evitar ver en cada una de sus fotografías el rapto de su inocencia, nada que no fuera otra violación más.

Sé que no voy a sorprender a nadie con este post, porque sobre esta muchacha ya está escrito todo, pero creo que no está escrita la verdad sobre ella, y que el único que llegó a conocerla de verdad dedicó el resto de su vida a cuidar  que a su tumba no le faltaran nunca flores.

jueves, 14 de marzo de 2013

LA SEGUNDA INOCENCIA



...es que pensar demasiado tampoco es bueno. Uno coge más depresiones por pasarse de rosca con el jodío intelecto haciendo horas extras que mirando el vuelo de una mosca o fijándose en las cornisas, Talkin. No te preocupes, amigo. Yo no quiero que sufras porque una cornisa atrape tu atención como si fuera una migración de mariposas monarcas.

Tus pensamientos, tus ideas, tus ocurrencias y extravagancias y tu perro Gasolino son mariposas para los que nos gusta salir al campo a respirar aire puro y distraer la atención con criaturas delicadas y exóticas.

En Puerto Real hay muchos camaleones. Cuando, paseando por la Cañada Real, me encuentro con uno cruzando el estrecho sendero de tierra que divide las dos masas arbóreas, me quedo regulando el esporádico y ecológico tráfico de bicicletas para que no le atropellen. Me siento muy policía local en esos momentos, más que cuando visto el uniforme. Pienso no pienso mientras tanto que para mí cruzar en tres pasos el carrilillo no supone ningún esfuerzo, mientras que para ese aventurero dinosaurio en miniatura, ese prodigio de la evolución, supone la misma proeza que la de los antiguos navegantes surcando el ignoto Mar Tenebroso.

No pensar en nada, o quedarse colgado de cornisas como gárgolas, o como mucho pensando al mismo ritmo que el paso de un camaleón, es disfrutar de una segunda inocencia. La segunda inocencia que da El no pensar en nada. En Nada". No te preocupes por eso, querido Talkin.

La clave reside en que tanto la mente como el cuerpo floten. Ananda, que es un budista por convicción en vez de por esnobismo y , además, de Cantabria, seguro que posee claves y llaves para abrir esas preciosas nubes de algodón. Solo cuando aprendes y dominas el arte de no pensar en nada puedes disponer de toda tu energía para tomar una decisión o afrontar un problema cuando llegue el momento. La última del gran Denzel Washington va de eso en su peli " El Vuelo" El tío está durmiendo pensando en su nada alucinógena y cuando de forma abrupta unas turbulencias le despiertan, es capaz de tomar las difíciles decisiones correctas para salvar a todos los pasajeros de darse un pellejazo mortal.

Es importante que una buena parte de nosotros pase por la vida de forma instintiva en vez de estar dándole vueltas a la cabeza todo el día. Además, creo que desconectarse es una forma de meditación que agradece y expande el espíritu. Demasiados conocimientos y actividades pendientes enredados en un embudo mental nos atascan y nos paralizan. ¿Quién no conoce a personas de su entorno que son muy inteligentes y que, pese a su inteligencia,  han echado todo a perder? Pues esas personas lo han echado todo a perder porque no se paran nunca a mirar cornisas, a comprobar que al techo no le iría nada mal otra mano de pintura o a esperar a que un camaleón cruce el Mar Tenebroso.

No sufras, querido amigo, querido Talkin. No es depresión, es solo tiras de pellejo que la vida se cobra por ser mejor y poseer más sensibilidad que los demás. Por ser más inocente.


domingo, 10 de marzo de 2013

DOS FOTOS DE TALKIN


Son dos fotos de Talkin. Esta de aquí arriba, gracias a mis grandes dosis deductivas, está hecha a las ocho menos cuarto. Y lo titula El Mar Mitako, que debe ser una playa donde o bien se come muy bien ricos platos de bonito con papas , o bien cuando te quitas las chanclas y aspiras la primera bocanada de oxígeno marino, sueltas tu taco-exabrupto favorito a pleno pulmón y te quedas la mar de ancho. He leído que en Cantabria al marmitako vasco se le llama "sorroputón", lo cual ya de por sí es un taco considerable, pero he vuelto a la fuente de información, y no es así, sino "sorropotún", que mejora el anterior vocablo pero no la tentación de decirlo mal. Aquí en Cádiz tuvimos unas farolas como las de la foto que fueron muy criticadas. Los gaditanos las llamaban "las cerillas" y sólo por instalarlas el anterior Alcalde perdió las elecciones. A los gaditanos nos gustan las farolas barrocas de toda la vida, o como mucho, neoclásicas, que para algo alumbramos la Ilustración en la penumbrosa España cañí de entonces. Lo que sí me gusta son los bancos de piedra, como en general me gusta todo lo que es práctico. En el paseo marítimo de Cádiz existe un barandal que si te caes a popa te puedes partir la crisma. En la foto también he notado que hay tensión sexual entre la señora del carrito y el hombre de la camiseta Desigual. Pero lo que más me ha gustado es el solícito padre atendiendo a su niño, pues ya le toca la merienda-cena en casa y bien que lo siente, porque a su lado había una bañista que se quedó con sus ojos y aún con la última mirada antes de irse en bicicleta. Ir a la playa en bicicleta para mí es un gustazo. Tardo no más de treinta minutos en plantarme en Valdelagrana con mi bici, con el grado de sudor y cansancio justos para que el primer chapuzón sea gloria bendita.


Esta foto la titula Talkin " El mar desprovisto de lirismos". ¿Dónde está esta metáfora tan desapacible y certera como no actuemos a tiempo? Ya nos dirás, Talkin.

Ell mar puede por culpa de nosotros convertirse en un lugar donde ni los desesperados puedan dormir al aire libre, un lugar con salitre borracho, un paisaje diluido en humedades humilladas con nostalgia de  pasos de niño sobre la arena de sus playas, con delfines bubónicos sin su hermoso lomo de esmeraldas, sin reírse desde que les dejaron sin su patria hombres trajeados que no saben ser piratas.

GRACIAS POR TUS DOS FOTOS, TALKIN

La misma foto, pero en blanco y negro, es un detalle que ha tenido nuestro maravilloso Ananda, que como fotógrafo profesional y amante del arte se ha despachado con un comentario genial, como todos los que hace.

miércoles, 6 de marzo de 2013

TRES ERAN TRES


Hoy me he enterado de esta noticia: NAPOLEON, como figura histórica, más


... el guión de STANLEY KUBRICK, en el que estuvo trabajando durante dieciséis años ( un perfeccionista obsesivo como él...¡dieciséis años estudiando a Napoleón! )


....más un señor llamado STEVEN SPIELBERG que es un señor que parece que se defiende en eso de crear y dirigir películas,...

IGUAL A
 
¡una miniserie sobre NAPOLEON!
 
¡¡¡ DIOS EXISTE!!!

sábado, 2 de marzo de 2013

LARGAOS


"Largaos de una vez. Largaos, sí. Los que trincáis, los que habéis trincado, los que permitisteis que otros trincaran y los que todavía hoy no hacéis nada por que se deje de trincar. Todos. Sobráis, de verdad, dejadnos en paz de una puñetera vez.

Dais asco. Vuestra falta de vergüenza ha llevado la nuestra hasta límites que jamás deberíamos haber conocido. Y ahora os cubrís el culo los unos a los otros, un culo que tenéis tan sucio que hasta las pústulas de vuestra ignominia os han invadido el cerebro, y ya no es posible distinguir vuestras declaraciones rellenas de mierda de la peste que emana de un zurullo común.

Callaos. Callaos de una vez. Dejad de contaminar los medios, las noticias y nuestro estado de ánimo. Dejad de hacer comunicados y ruedas de prensa, disolved todos los chanchullos, deponed vuestros privilegios y salid con la cabeza bien baja y las manos en alto.

Dejad de desanimar a la gente. Dejad de decirnos que todo fue por nuestra culpa. Dejad de tomarnos por gilipollas. Ah, y no os atreváis a volver a decir que sois reflejo de la sociedad en la que vivís. Que si robasteis fue porque os lo pusieron delante. Que sois víctimas de un vacío legal, un entorno corrupto y una dudosa moral. Que sois reflejo de la gente, representantes elegidos por el pueblo. Vosotros no sois pueblo, vosotros sois escoria.

Devolvedlo. Devolvedlo todo. El dinero, las propiedades, los cargos, las dietas, los sobresueldos, las comisiones, la dignidad que os quede y la honorabilidad que algún día se os supuso. Y cuando hayáis acabado, devolved la nacionalidad que se os dio por error. Porque no merecéis formar parte ni de este ni de ningún país. No hagáis ni las maletas, saltad por la borda, como las ratas, salid nadando. Y quien no sepa, que se joda, francamente nos da igual.

Pedid perdón. Disculpaos. Ante todo aquel que votó. Ante todo aquel que piensa seguir votando. Porque ellos han creído en un sistema democrático que vosotros habéis violado, sodomizado y puesto del revés. No, yo no os concedo la presunción de inocencia. Porque cuando uno deja que ciertas cosas ocurran, acaba siendo cómplice aunque solo sea por ignorancia, por desidia u omisión.

Y por último, largaos, sí, pero sin dejar rastro. Ni se os ocurra nombrar sucesores, ni gestores, ni primos segundos que calienten vuestra silla. No tengáis la cara dura de intentar dejar un legado. Vuestro único legado será la vergüenza. Y tampoco os atreváis a interponeros nunca más entre la gente de bien y sus lícitos objetivos. Porque en este país aún quedan ciudadanos, empresas e incluso algún político honrado que construyen, que siguen luchando y que ahora ya solo tienen una misión: que no les jodáis la vida, que les dejéis hacer.

Pero sobre todo y ante todo, por lo que más queráis, seguid ignorando estas órdenes, exigencias demagógicas de un publicista que de vez en cuando hace el capullo en televisión."      escrito por
Risto Mejide