martes, 27 de septiembre de 2011

EL PADRE DE HORTENSIA


Idolatría, envidia, temor, rechazo, confianza, odio, amor, esperanza......., cuando una persona es capaz de despertar sentimientos tan dispares, cuando Beethoven le compone una Sinfonía (la Tercera) mientras que Chautebriand se caga en sus castas, cuando Goethe le saluda como " el alma del mundo que inaugura una nueva era" mientras que para el poeta romántico inglés Keats  no era más que un  "engendrador maldito de sufrimiento", cuando un ser humano provoca tal alud de sentimientos irreconciliables, ...entonces es que estamos ante alguien desposeído de su propia identidad.

¿Cuál fue la verdadera personalidad de Napoleón?

Es una incógnita, porque para averiguarlo sería preciso haberle conocido en su ambiente más íntimo, ese refugio que nos reservamos todos para quedarnos en pelotas con nuestros defectos y en el que toda ostentación y teatro carecen de sentido.

Por esa razón siempre he leído con especial atención todo cuanto  han escrito quienes compartieron con él ese refugio. En especial a HORTENSIA, su hijastra. Hortensia fue la primera en recibirle tras su fuga de la isla de Elba, y cien días después, la última en despedirle antes de su definitivo destierro en la mefítica isla tropical de Santa Helena, frente a la costa occidental africana.

No me vale la Heroica de Beethoven, ni las elegías de Goethe ni Schiller, ni las salutaciones de Goya, ni las lisonjas de su numerosísima familia, ni los panegíricos de sus generales. Y, por el mismo motivo, tampoco me valen las coces de sus detractores, las invectivas de sus adversarios políticos, ni el odio encendido de sus enemigos militares. Tampoco el análisis minucioso, psicológico y magistralmente doctoral de sus biógrafos más competentes, con Emil Ludwig y Stefan Zweig a la cabeza.

Hortensia.. Me fío de ella. No era su hija biológica. La adoptó siendo una mocita tras casarse con Josefina. Esa batalla la ganó como le gustaba ganar a Napoleón las batallas, con prontitud y acudiendo en tropel allí donde más se le necesitaba. Y Hortensia y su hermano Eugenio necesitaban un padre cariñoso y solícito. Napoleón venció el natural recelo de los dos niños ante un hombre "nuevo" que sustituía extrañamente a su papá.

Para Hortensia Napoleón tenía una apariencia romántica, aparentemente enfermiza, que escondía una energía febril. Destacaba por su ojos penetrantes y fogosos, que acojonaban un poco bastante cuando se encendía en sus pupilas el testigo del cabreo, que no fueron tantos ni tan histéricos ni tan públicos como sus libeladores decían, tratando de ridiculizarle.¿ Acaso no perdemos los nervios todos de vez en cuando? Habitualmente era de modales contenidos y respetuosos. Le bastaba y le sobraba con fulminar con la mirada porque Napoleón tenía ojos de Bette Davis..

La edad no fue benevolente con él. La anemia crónica de su deficiente alimentación durante su estancia en la academia de Briennes le perfiló una silueta flaquilucha que le acompañó hasta que los cocineros del Palacio de las Tullerías se encargaron de ponerle más gordito, hasta conseguir que le apareciera esa barriguita cervecera que muestran Gross, Ingress y Jerome en sus cuadros. Y también le crecieron las tetas, padecía de ginecomastia, tetillas de mujer. No es al único que le ha ocurrido, ...ejem.... Bueno, qué más da, así estamos más sexys y es lo que corresponde a un amante lesbiano como yo.

Napoleón acabó rollizo y sonrosado y con unos pocos jirones de pelo, algo que llevaría mal porque en su juventud lucía una hermosa melena lacia de pelo negro. En campaña dormía a la intemperie como el resto de sus soldados si no estaban protegidos, muchas veces sobre su propio capote. De dormir así debió coger algún enfriamiento en los riñones porque padeció dolores abdominales el resto de su vida, pero hubo algún maledicente que aseguraba que Napoleón se metía la mano en la casaca a la altura del cardias estomacal para acariciarse el prepucio. Pues no. Napoleón no era Rasputín, no la tenía tan larga. ( El pobre pene de Napoleón sigue dando vueltas por el mundo desde que se lo seccionaron en la autopsia para tener un recuerdo suyo. Estos hijos de la Gran Bretaña...)

Era capaz de trabajar durante jornadas larguísimas y hacer de secretario suyo era de todo menos una bicoca. Ese pobre se ganaba el sueldo, ya lo creo..., porque Napoleón no se callaba ni bajo el agua y también ha pasado a la Historia como el único hombre que era capaz de hacer dos cosas al mismo tiempo. Demostró siempre un afecto profundo por sus hijos, los adoptados y el natural, el hijo que tuvo con María Luisa de Habsburgo, que murió con 21 años de tuberculosis convencido de que su padre fue un monstruo de tanto como le lavaron el cerebro en la corte austríaca. Seguramente se olvidó de las risotadas de su padre jugando horas y horas con él de bebé, algo que llamaba la atención de todos porque resultaba inusual en aquella época hasta el punto que se consideraba de mal tono que un padre aristócrata jugara con sus hijos. Pero él no era aristócrata, sino alguien que se burlaba de sus rancias costumbres.

Era muy familiar y protector, como correspondía a la educación corsa, fuertemente arraigada en la familia como centro del universo. Sentía un vínculo indisoluble con sus hermanos, a quienes intentó siempre favorecer con unas prácticas nepotistas que abonaron con razón algunas de las críticas más feroces. El mismo reconoció su error en Santa Helena. No todos los hermanos se aprovecharon de la sombra de Napoleón. Luciano, el listo privado de la familia, no consintió que su hermano metomentodo vetara sus esponsorios con la coquotte que le gustaba, y le mandó a freír monas. Luciano acabó sus días apaciblemente en una villa romana, en compañía de su amada que le hizo muy feliz y sobrevivió a todos sus hermanos. O sea, la receta, chicos, es estar enamorado para longevear la vida.

Sin embargo, y esto lo quiero apuntar, existió un momento de reconciliación entre Napoleón y Luciano. Fue durante el período de los Cien Días: desde que huyó de Elba hasta que le derrotaron en Waterloo.  Cuando más cuestionado y acorralado se hallaba Napoleón, Luciano reapareció ofreciéndole su ayuda, como cuando el golpe del 18 Brumario ( No hay que olvidar que entonces Napoleón fue nombrado Cónsul gracias a Luciano, que se lo curró él solito).  Este capítulo me recuerda a una escena de una peli que me gustó bastante: Leyendas de Pasión, cuando el hermano mayor Aidan Quinn sale inesperadamente de la parte trasera del rancho salvando a su hermano Tristán Bran Pitt de una muerte segura, y sellando así su acto de reconciliación.

En Santa Helena, ya defenestrado políticamente y derrotado militarmente para siempre, un meditabundo Napoleón repasa su vida y vuelve a ser la pesadilla de un secretario llamado Les Cases, que escribió al dictado sus recuerdos y cavilaciones.

Y vuelve a ser un niño melancólico y enfermizo  dentro del resignado espíritu y el obeso cuerpo decadente de un hombre que conoció el esplendor y la gloria como pocos seres humanos han tenido ocasión de saborear.

Nunca aceptó las críticas de quienes le tildaron de avaro conquistador. Tuvo muy claro siempre contra quiénes luchaba: contra Estados, estamentos y clases sociales empeñados en perpetuar la pobreza y la ignorancia en beneficio suyo.  ¿Que se le fue la olla con eso de coronarse emperador en Notre Dame de manos del mismo Papa, un Pío, no sé si el V, el VI , el VII o el Pío pío Gorgorito). Pues sí. Véte a saber por qué lo hizo. ¿Por un subidón egocentrista? ¿Porque era una forma de arrebatar públicamente y para siempre el derecho de pernada reservada únicamente a los sangreazuleños? Él, un niñato , un mocoso de Córcega, sería capaz de arrebatar la corona de los Merovingios y de Carlomagno de las manos del Papa y coronarse a sí mismo, con dos cojones.

Y esa es la lección que ha dejado Napoleón a los hombres: en adelante , cualquiera con la suficiente fuerza de voluntad y grandeza, fuera labriego o soldado o vendedor de melones, podría hacer lo mismo. Y hasta hoy esto es posible, y si no que se lo pregunten a un hombre de raza negra que preside el país más poderoso de todos ( con permiso de China, de momento)

Nadie puede negar que la Humanidad ha avanzado mucho desde entonces, espectacularmente y a toda pastilla, gracias al ejemplo que nos dio y a los grandes imitadores que le salieron, hombres y mujeres que creyeron en sí mismos y se burlaron de los derechos clasistas. Las telarañas sirven para atrapar moscas y mosquitos. Los más fuertes, las rompen.

Sigo viéndole frente al mar en sus últimos días y le veo cansado, triste, vencido, apartado de su familia y custodiado por una agobiada guarnición inglesa que se las apañó para quitarle de enmedio sin prisas pero sin pausas gracias a pequeñas dosis de arsénico que mezclaban en su comida diaria, hasta causarle la muerte que le liberó  y dejó  su nombre escrito con una de las más sonoras e insuperables mayúsculas de la Historia:  NAPOLEON BONAPARTE, el padre de Francia, el padre de revolucionarias y no superadas tácticas de combate,  el padre del Código Civil, el padre de los estados modernos, pero sobre todo, alguien que supo saber ser padre de Hortensia y ganarse su amor.
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Estoy siendo muy coñazo, perdonad. Pero no me resisto a contar un par de cosas de las miles de anécdotas que orbitan alrededor del pequeñajo.
La escena es la siguiente: el ejército de colonos se bate en retirada mientras los ordenados destacamentos de Su Graciosa Majestad británica avanzan entre descargas cerradas y nubes de pólvora. Todos, todos huyen..., menos uno. Mel Gibson recoje del suelo una bandera estrellada y avanza solo, enarbolándola con gritos de "¡Noooo, ..noooo, avanzad, avanzad...", Atónitos por su espíritu valiente, salen en pos de él y le imitan. Ganan la batalla. La realidad tiene la costumbre sana de superar a la ficción.  La película es El Patriota, y Mel Gibson, del que he leído muchas cositas, asegura que esa escena está basada en lo mismito que hizo el joven Napoleón en la batalla del Puente de Arcole.
Mientras que Francia gozó de un dirigente capaz de haber hecho eso, aquí nosotros padecíamos a un auténtico gilipollas, tan ruín y tan cobarde y tan rastrero y pelota, que mientras en España el pueblo se desangraba por su Rey El Deseado, este estúpido, confinado por Napoleón en el Castillo de Valencay, festejaba con fuegos artificiales cada victoria de la Grand Armée en tierra española. Napoleón me gusta mucho porque, a todos los que fueron como el capullo Borbón Fernando VII, les dio por saco todo lo que pudo y más, y bien que hizo. Consiguió , al menos, que el pueblo no se conformara con el primer imbécil al que se invistiera como rey o reina.
La segunda cosita que quiero apuntar es que Hortensia fue la madre de Napoleón III, y la bisibisabuela de nuestra Sofía.
Y la tercera, es que si picáis en el google "frases de Napoleón", os saldrá un chorro de páginas.
Porque Napoleón inventó también el Twitter

17 comentarios:

  1. Buenos días

    De coñazo nada, es interesantísimo todo lo que nos cuentas con tu toque particular. Lo de que Napoleón inventó Twitter, me ha arrancado una carcajada...es un auténtico placer comenzar el miércoles riendo.

    Tened todos un buen día.

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  2. ¿Sabes que pensaba mientras leía?

    Ojala hubiera tenido yo un profesor de historia como tu,que hubiese despertado entonces esa curiosidad por conocer, y que las clases fuesen tan amenas como tu lectura.
    El Sr. Serra era un autentico coñazo y la mitad de las clases las pasaba ¡durmiendo!,incluso las horas de exámenes.Así que imagínate el panorama.

    Un abrazo, Luis.

    Un beso, Luz ¡Qué madrugadora!

    Feliz tarde a tod@s.

    xulita

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  3. Me encanta leer la historia con la pasión con la que nos la cuentas. Sobre todo, el cariz humano que hay detrás de la figura pública y que tanto te esfuerzas en descubrir y descubrirnos.

    Así que puedes ser todo lo coñazo que quieras y te apetezca, porque, primero, este es tu blog, faltaba más, y segundo, estamos encantados de leerte, y a mi aún me queda reserva de palomitas para mogollón de entregas :-D

    Por cierto Luis, no conozco esa zona motera que me comentas en el anterior post. Son tantos los horizontes que me quedan por disfrutar... Pero lejos de amilanarme me dan deseos de ensillar de nuevo mi jamelgo y lanzarme en pos del ocaso tras las montañas.

    Un abrazo Luis.

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  4. ¿Coñazo? Me ha parecido interesantísimo todo el post, y aún mas tus reflexiones personales...

    ¡Un fuerte abrazo!

    Ananda

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  5. Gracias, Luz. Te voy a regalar una frase twitter de Napoleón: "Las batallas contra las mujeres son las únicas que se ganan huyend"....

    Xulita....¿cómo que qué madrugadora Luz? Su comentario es de las 07:39. ¡No me dirás que encima que vives frente al mar te permites el lujo de levantarte a las ., cuando te da la gana! A esa hora del comentario de Luz, ya estoy pedaleando en dirección a mi trabajo ( ahora cojo la bici para todo). Pues con el tema de los profesores, yo he tenido mucha suerte. Casi todos han sido muy buenos, algunos excelsos, insuperables, como el de matemáticas en FP o el de Historia del Arte en COU. He disfrutado muchísimo.

    Pues Angel, intentaré colgar algunas fotos de esa parte de la sierra sub-bética, para abrirte boca.

    Gracias, Ananda, siempre tan generosísimo conmigo. Te lo agradezco muchísimo.

    Un abrazo para todos

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  6. Esas intimidades que cuentas de los actores de la historia, son fascinantes. Mezcladas con ese touch tan personal y cómico tuyo -no digo que seas payaso- son alucinantes:)
    Lindísimo pasé leyéndote y enterándome del pequeño.
    Un besazo, grandote

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  7. Halaaaaaaaaa!!!

    ¿Te gusta picarme,eh eh eh?
    Yo también madrugo.A las 8,00 ya estoy currando.Lo que ocurre es que a las 7,39, minuto más o minuto menos, no estoy para nada.A esa hora ando aún desperezándome y preparándome un café con leche tamaño familiar.Y necesito algo de tiempo para ponerme en marcha.Por suerte vivo muy cerquita de mi trabajo, 5 minutos andando y 1/2 minuto en coche.Por eso lo decía,...Hombre!

    Luz,ya ves que te lo digo entre signos de ADMIRACIÓN.

    Un beso a tod@s incluido tú, jodío.
    MUAAAAA!!!! :-)

    xulita

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  8. Hola, Iluso Luis...Me vas a perdonar...soy lectora habitual, pero no puedo leerte tan largo...no sé..., hay algo dentro de mí que me empuja a correr!!! pero aún así, sabes que te adoro!. Pues yo no borro tus comentarios, y dudo mucho que Zully lo haga...Algún desaprensivo, seguro...ni caso!te que-re-mos!!
    Un beso,

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  9. Y yo a tí, Pat, por eso me he dirigido a tí con tanta seguridad y confianza. Verás, estoy mosca. Desde hace un tiempo el ordenador hace unas cosas muy raras y nos da la sensación de que una mano del más allá nos lo maneja a su antojo. Será cuestión de observarlo bien, y si se confirma que algo o alguien me lo ha monotorizado, pues sacaré al inspector Clouseau que hay en mí para investigar. Un beso, Pat.Ah, y no te censuro para nada que no seas capaz de leer tochos tan largos.

    Xulita, así que...a cinco minutos andando y medio en coche, tiempo que empleas como mortal de tu casa al trabajo y de tu trabajo a casa. ¿Sabes qué, jodía? Que creo que Napoleón te nombraría General. Napoleón tenía la costumbre antes de imponer los galones de general a nadie de hacerle una única pregunta, y la pregunta era...." ¿tiene usted suerte?"..., si el oficial propuesto contestaba que "no", el nota se quedaba sin ascenso. Generala Xulita, quedo a sus órdenes, jajaja....Un beso

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  10. Pues yo sí tengo suerte, o sea, que ya estoy ascendida ¿no? Saca, saca a ese inspector Clouseau... me encantará. Besos!

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  11. Bueno, creo que ya ha quedado demostrado en el post de Abuelita Zully que como inspector Clouseau no tengo precio. Que me gane la vida como policía es uno de los enigmas más grandes de la Humanidad. Pero bueno, malo, malo del todo, no soy. De vez en cuando, suena la campana.
    Pues yo no sé si eres o no una chica con suerte, pero yo sí te puedo decir que he tenido la suerte de conocerte.

    Feliz fin de semana a todos.

    ¿Cuándo se va a ir esta caló?

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  12. Hola Luis,
    Sube fotos, sube fotos, que yo con poco ya voy :-D
    Por cierto, no he dicho nada explicitamente, pero en mi blog he abierto una nueva sección: VIAJES, donde voy a ir colgando fotos de esas que, al menos para mi, son de ensueño, porque claro, yo he estado ahí, y he sentido algo increíble, aunque muy difícil de transmitir en una foto.

    Gracias por pasarte, eres un sol.

    Así me gusta, al curro en bici. Casi todo son ventajas, aunque por estos lares, allá por enero y febrero, primero hay que estar quitándole la escarcha, y algunos días, hasta ponerle cadenas a las ruedas :-D
    Yo tardo del trabajo a casa 10 minutitos en moto, pero es que en bici tardo casi lo mismo :-D y todo por seguir el ritmo de los coches por la calzada para no llevarme un susto, porque lo del carril bici tiene guasa todavía.

    Un abrazo y feliz fin de semana para todos.

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  13. Buenas tardes para los que ya hayan almorzado, días para los demás.
    A las 8 me toca estar en el trabajo y siempre suelo estar allí un poco antes. Os leo y medito. El otro día os dejé los buenos días. Un abrazo Xulita, entendí tu admiración.
    No sé qué voy a hacer cuando me jubile, no me queda mucho. El trabajo también me ayuda a subir la cuesta de mi día a día.
    Lástima no teneros más cerca físicamente, de otra forma os siento bien cerca.Tengo un cesto de nueces y otro de castañas. Son sanas y "caseras", demasiadas para mí sola.
    Disfrutar de la vida y del fin de semana.
    Un abrazo inmenso para todos, desde la Guardia.

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  14. Recojo el guante, Angelillo. A ver si las ordeno ( las fotos), y cuelgo aquí unas poquitas de Priego y Zuheros, y de los olivareros oceánicos.

    LuZ...¿sabes? ..soy de los que creen sinceramente que lo mejor de la vida llega cuando te jubilas ( con la condición de llegar medianamente sano de físico y de mente) Puede ser la Edad de Oro, ElDorado vital. Cuando coincido con ellos en cualquier hotel o restaurante, ...es envidiable la vitalidad que demuestran y el buen humor que regalan...Yo, de mayor, quiero ser como ellos. Pues te vas a librar de que no deguste contigo las nueces y las castañas porque estamos muy lejos, porque con lo que me gustan...Hago helado y flan de nueces, y crema de castañas para los entrecots, ...Un beso, LuZ

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  15. Luz,Sería un placer compartir contigo un café y unas nueces con miel y helado de vainilla, Uhmmmmm!!

    Cuando tenía unos 8 o 10 años, o sea hace la tira, hice un viaje con mis padres por Galicia.Recuerdo que en la Guardia ,comimos unas sardinas deliciosas en un restaurante que estaba en lo alto de un mirador.Un sitio precioso.

    Castañas, nueces, la Guardia, a punto de jubilarse...¡Otra Generala con suerte!

    Aquí está cayendo la primera lluvia en condiciones del otoño, con rayos y agua a cantaros.
    Muy buen fin de semana a tod@s.

    Un beso.

    xulita

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  16. No, si encima te llueve a tí primero, Xulita, os quita la bendita lluvia este maldito bochorno...

    ¡Quedas ascendida a Mariscal de Campo!

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  17. ;-))))))))

    Mira que ya me había reprimido de decirte nada con el cachondeillo, distancia casa-trabajo, trabajo-casa.
    ¡¡¡¡Eres la monda!!!!

    Un beso.

    xulita

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