sábado, 29 de enero de 2011

LA SONRISA DE PILAR

La verdad elige a veces abrirse paso entre lágrimas a través de una madre malherida y usa el mismo espacio reservado estelarmente a la mentira. Verdad de amor y dolor, de dolor e impotencia, verdad desnuda hasta los huesos que denuncia y evidencia, verdad que nace del útero mortal de la miseria, verdad que viene de morirse y que por haber así nacido el hipócrita y maldito ya no sabe dónde ir, por dónde escapar ni perderse: sólo se le permitirá mirar a un lado, bajar los ojos, callar la boca y esconderse.

Ese día Pilar empujó al crimen como oficio a su negro precipicio. Abolió el corazón seco y los discursos podridos. Hizo callar las alharacas y en la cara de quienes mienten y mintiendo se divierten, dibujó un maleficio: sacando fuerzas de flaqueza desde el surco de la tierra ensangrentada, clavó un cuchillo mortal en medio del deshonor y marcó la Valentía y la Verdad como cicatriz imborrable a fuego marcada en la endurecida piel de hombres y mujeres congresistas que la escucharon en silencio con gestos torcidos , huidizas miradas insensibles y cobardes ganas de volverse invisibles.
Y eso lo hizo una mujer casi acabada, agonizada por una mortandad de verdades mentirosas y mentiras proclamadas, que bebió amargura envenenada en una fuente de odio absurdo e interminable y dejó su corazón embadurnado de ceniza sufriente, una madre que apenas podría respirar en adelante si al volver a su casa ya no estaba su simiente.


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La verdad es que cuando ví a Pilar soltando las verdades del barquero a la cara de los señores diputados ( algunos más interesados en leer el periódico, como el sr. Zaplana (sí, el mismo que declaró que él estaba en política para forrarse.No hay por dónde cogerle- ) con esa fortaleza que hizo nacer de la fragilidad de su pena , con toda la fuerza de su dolor, no me extrañó. En realidad sé muy bien que los auténticos héroes de la sociedad son anónimos, y no se les conoce hasta que se convierten en eso, en héroes en virtud de un destino que les hace reaccionar extraordinariamente ante situaciones extraordinarias . Y ella lo hizo de una forma que hizo temblar al Congreso. El periodista Luis del Olmo, que fue quien me acompañó mientras me bebía las lágrimas al lado de una radio, afirmó que se abría un antes y un después en la conciencia de los políticos tras la alocución de Pilar.

Exageró. Es evidente que a los señores diputados por un oído les entró y por otro les salió.
Pero lo que quedó para siempre fue el valor y la entereza y también las lágrimas de mi amiga Pilar.

Pero ahí la tenéis, resurgiendo entre las lágrimas con su bonita sonrisa, en brazos de un loco que la hizo bailar como una peonza en un banquete especial para todos. Un loco que regresó a casa derrengado y con agujetas hasta en el reloj, pero con la satisfacción de haber bailado toda la noche con el brillo maravilloso de la sonrisa de Pilar, una noche mágica en la que apenas se apartó unos pocos metros de la orilla de ese río de lágrimas en el que navega desde que lo único que quedó de su hijo Daniel fue su reloj y su recuerdo.


6 comentarios:

  1. Un beso, Pilar.

    Para quien no sepa o no se acuerde de lo que hiciste en el Congreso de los Diputados, con mucho gusto les presento a una extraordinaria mujer

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  2. Querido Luisito
    GRACIAS por recordarnos las palabras que como un aldabonazo Pilar pronunció en el Congreso de los Diputados, haciendo que muchos la escuchasemos con nudo en la garganta y que fueron y serán ejemplo de valentia y pundonor. Hoy nos devuelven a una Pilar con sonrisa, este gesto me reconforta y me hace comprender que los seres humanos tenemos capacidades que aunque nacen del desamparo, se convierten en nido para la esperanza
    GRACIAS de nuevo Luis
    un abrazo desde las tierras del norte

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  3. Muy hermoso Luis. Hermoso mirar a los ojos al dolor y no volver la mirada, mirar de frente la mentira que nos rodea y gritar basta con los puños cerrados y los ojos abiertos, hermoso el eco de unas palabras que a los políticos no abrieron un corazón blindado, pero que al pueblo se lo derramó en torrentes, ese mismo pueblo tan esgrimido como bandera como denostado y ninguneado por aquellos que son títeres de oligarquías henchídas de podrido poder.
    Por eso esa sonrisa vale su peso en oro, y quien se la ha despertado, mi mayor admiración.

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  4. Nuestros políticos tienen la triste costumbre de no estar a la altura de las circustancias...nunca.
    No me importa de qué partido se trate...Pilar tiene razón.
    Con todo el horror que ella vivió...pese a todo...tuvo la "suerte" de poder hacer oir la voz, la suya y la del resto de las victimas y sus familiares...Pudo decirles a los politicos y al resto de la sociedad la ignominia que habían sufrido, que habían sufrido...y seguirán sufriendo hasta el fin de sus días...Y digo "suerte" porque me viene a la memoria el caso del Yak-42...

    En este país, capáz de gastarse fortunas en futbol o en subvenciones variadas, o en pagar exposiciones de "artistas" que no se comprenden ni a ellos mismos, capaz de incrementar sueldos astronómicos con dietas, extras, pluses y prebendas, capaz de abonar facturas de móviles personales, gastos de "representación", comidas y cenas oficiales, recepciones, canapés...coches oficiales...¡Dios mio! En este país...capáz de todo eso y mucho mas...se subió a un grupo de soldados, nuestros soldados, en mision humanitaria, a un avión que no pasaría una revisión técnica ni a simple vista...El Ministerio de Defensa contrató, alguién subcontrató y volvió a subcontratar y el avión se estrelló al final...Pero no se acaba aquí la historia..¡No! Es aún peor...

    Hay prisa, mucha prisa por celebrar funerales de estado y a las familias se les entregan los restos de sus muchachos...cambiados, mal identificados, como si fueran...nada...Los familiares se abrazan, sin saber la verdad, a féretros que no contienen los restos de sus hijos, maridos, hermanos, novios...

    No se me ha ido nunca de la cabeza esas víctimas, servían a su país, nos representaban a nosotros, estaban orgullosos de su trabajo...y se les pagó de la peor manera posible.
    Nadie puso una bomba, nadie disparó un gatillo...¡Fué un accidente! decían. Nadie se hizo responsable, el Ministro Trillo se encogió de hombros...muchas veces.
    Antes de que subieran al avión se encogió de hombros, cuando sucedió el accidente...se volvió a encoger de hombros...cuando se descubrió lo que había pasado...se encogió de hombros otra vez...
    Yo no me encojo de hombros...porque no lo olvido...y cuando le veo en televisión, siento en las tripas una sensación que no le deseo a nadie. Y cuando le veo sonreir y recuerdo lo que pasó...y todo lo que no pasó...las tripas me desaparecen disueltas en un asco visceral.
    Y me siento orgulloso de aquellos chicos, y de sus familias, y muy avergonzado de mi país, que permite que cosas así puedan pasar, que no le pasa factura a los poderosos...que silencia la ignominia con la etiqueta burda del "deber cumplido"

    En los trenes es cierto lo que dice Pilar, ¡ibamos todos!, pero también íbamos en aquel avión, y al dia de hoy en mi fuero interno, siento que no se ha hecho justicia...

    Pilar, al menos pudo hablar...

    ¡Un abrazo fuerte!

    Ananda

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  5. He tenido serias dudas a la hora de publicar este post dedicado a esta amiga mía, pese a contar con su confianza y permiso. Tiene enemigos mediáticos que todavía mantienen que sus lágrimas en el Congreso fueron "lágrimas de cocodrilo", pero como dice Sara, he querido resaltar -sobre todo mostrando nuestra foto ( ey, que conste que ya no estoy tan fondón)- que, pese a todo el dolor que existe en el mundo, todo el dolor que somos capaces de gestar sólo para poner de manifiesto las altas cotas de miseria que podemos llegar a alcanzar cuando queremos imponer nuestras ideologías y nuestras creencias, cuando enfrentándonos a esos peligros utilizamos las peores armas de la mentira y la violencia, pese a todo, ...siempre las ganas de vivir se abre paso a través de una simple sonrisa que a mí, por lo menos, me devolvió a la Pilar que conocí cuando venía a Puerto Real de vacaciones plena de una alegría contagiosa que compartía generosamente con sus amigos.

    Pues muchas gracias por vuestros comentarios y vuestro cariño.

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  6. Despues de escuchar a Pilar,se pueden decir tantas cosas...
    Pero me quedo con lo que ella transmite, valor, coraje, fuerza.
    Ella y gente como ella,(TU) hacen que siga creyendo en la humanidad...
    Gracias Luis.

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